Los dos protagonistas de esta historia no tenían ni idea de que sus vidas iban a cruzarse.
Ella, Kate McClure, es una joven de 27 años de Nueva Jersey que trabaja para el departamento estatal de transportes. Él, Johnny Bobbit, tiene 36 años y aunque nació en Carolina del Norte la vida le llevó hasta Filadelfia.
La mala suerte cambió su vida. Perdió todo su dinero y se convirtió en un sin techo. Llevaba 18 meses durmiendo en las calles.
Hace un mes McClure salía de trabajar y se dirigía hacia su casa. No calculó bien y se quedó sin gasolina en plena autovía. Era de noche y no conocía la zona.
"Estaba completamente aterrada y sin saber muy bien cómo reaccionar.
Nunca antes me había quedado sin gasolina", explica McClure al diario Daily Mail.
Bobbit estaba sentado, aguantando un cartel en el que pedía una ayuda económica, a pocos metros de su coche. Allí llevaba durmiendo más de un año.
Rápidamente se dio cuenta de que algo le había ocurrido a la joven así que se acercó a preguntarle. Ella, algo nerviosa, le explicó que se había quedado sin gasolina.
"Me dijo que cerrara las ventanas y los seguros del coche y que me quedara dentro que volvería en un momento", asegura la joven. Y así fue.
Bobbit se gastó los únicos 20 dólares que tenía para comprarle una garrafa de gasolina.
Ella no llevaba nada de dinero encima pero él le dijo que no se preocupase, que no quería dinero.
Al día siguiente McClure y su novio volvieron al mismo punto de la autovía. Allí seguía Bobbit, junto a otros tres amigos sin techo.
Le pagaron la gasolina y le llevaron mantas, abrigo, y algo de comida. Las visitas se fueron repitiendo y cada vez conocían más acerca de su historia.
"Nos contó que había sido paramédico y que también había estado en la Marina. Cada vez que le llevábamos comida la compartía con sus compañeros. Nos decía que allí se cuidan entre ellos. No tienen a nadie más", sostiene McClure.
Bobbit les explicó que una mala decisión le llevó a vivir en las calles."Después de salir de la armada intenté ahorrar dinero para comprar un camión y poder trabajar con él. Poco a poco las cosas se fueron torciendo", explica Bobbit al Daily Mail.
"Pasé una ruptura amorosa muy complicada, perdí dinero y recurrí a las drogas. De repente un día sucedió. Tuve que pasar la noche bajo un puente porque no tenía dinero ni un lugar donde domir", sostiene.
Esa noche se convirtió en una semana y después en 18 meses. Bobbit perdió todos su papeles. No tiene credenciales, ni seguridad social algo que le supuso un problema a la hora de buscar trabajo.
"Cuanto más sabíamos sobre su vida más nos obsesionábamos con él y en cómo ayudarle de verdad. Su historia es algo que podría pasarnos a cualquier de nosotros", explica la joven. "Un día a mi pareja se le ocurrió recurrir a GoFundme, una página para recaudar fondos", añade.
Allí contaron la historia de este veterano sin techo y pidieron 10.000 dólares para poder pagarle a Bobbit un alquiler y una ayuda económica mensual.
Eso fue hace doce días. Hoy, su página alcanza ya los 120.000 dólares. Más de 4.000 personas han dejado un donativo.
La pareja asegura que administrará el dinero, que será integramente para Bobbit. "Con el dinero que hemos conseguido recaudar tendrá casa asegurada y comida.
Es el empujón que necesitaba para salir de la calle y volver a retomar su vida anterior", explica McClure.
"Me encantaría poder estudiar medicina o volver a trabajar como paramédico", sostiene Bobbit. Todos confían en que lo conseguirá.
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